La heroica movilización de los petroleros de Las Heras (provincia de Santa Cruz) que duró más de dos semanas ha desatado toda la furia de la clase dominante y sus agentes en el gobierno, la judicatura, la prensa y las fuerzas de represión. A través d La heroica movilización de los petroleros de Las Heras (provincia de Santa Cruz) que duró más de dos semanas ha desatado toda la furia de la clase dominante y sus agentes en el gobierno, la judicatura, la prensa y las fuerzas de represión. A través de la acción directa de masas: huelga, corte de carreteras, manifestaciones demostraron el poder de su acción colectiva. Y pese a difícil situación represiva consiguieron imponer, total o parcialmente, una parte de sus demandas: el encuadramiento en el convenio de trabajo petrolero de los trabajadores adscritos al convenio de trabajo de la Construcción (con menos salarios y peores condiciones de trabajo) pese a que desarrollan la misma labor que el resto, el pago del salario durante los días de huelga, el compromiso del gobierno de subir en el mes de abril el mínimo imponible del impuesto a las ganancias que afecta injustamente a los trabajadores que ganan más de 1.800 dólares (un salario equivalente a la cesta familiar), ningún despido por la huelga, poder jubilarse con 25 años de trabajo al desarrollarse su labor en condiciones de insalubridad y desgaste físico extremo en una de las zonas más inhóspitas de Argentina, y la jubilación con el 82% del salario ajustada a la inflación.
El día 10 de febrero los trabajadores rodearon la comisaría de Las Heras donde estaba detenido el compañero Mario Navarro, dirigente de los trabajadores, que había sido detenido por orden judicial para descabezar la huelga. La policía respondió con una salvaje represión de botes de humo y balas de goma. Los trabajadores denunciaron que en medio del tumulto aparecieron provocadores pagados por la patronal, la multinacional Repsol de España, y de la burocracia sindical que, vergonzosamente se alineó con la patronal y en contra de la huelga, desoyendo la voluntad unánime de los trabajadores petroleros de iniciar la lucha. Como resultado de todo esto, resultó muerto el policía Jorge Sayago. Ahora el gobierno imputa la responsabilidad por este hecho a los trabajadores, pero éstos lo niegan.
El gobierno de Kirchner ahora envió cientos de efectivos de la Gendarmería Nacional (uno de los cuerpos policiales más represivos de Argentina) y decenas de agentes de la SIDE (servicio secreto).
Los trabajadores han denunciado la instauración de un estado de sitio en la zona, donde son continuamente hostigados por las fuerzas represivas con amenazas y coacciones, se les impide realizar asambleas con la militarización de las instalaciones petrolíferas, etc.
La lucha de Las Heras ha desnudado el fraude de la democracia burguesa, una cortina que esconde la violencia y la dictadura más desnuda de los grandes capitalistas. Depositamos, por lo tanto, toda la responsabilidad por la muerte del policía Sayago en aquellos que violentaron con todos los medios a su alcance la voluntad soberana de los trabajadores de exigir mejores condiciones de vida y de trabajo: patronal, Gobierno, prensa, policía, jueces y burocracia sindical.
Exigimos el retiro inmediato de los cientos de efectivos de la Gendarmería y otras fuerzas represivas de la zona donde se ha instaurado un verdadero estado de sitio, amenazando y humillando a los trabajadores y sus familias.
Esta lucha va más allá de los trabajadores petroleros. Quieren un escarmiento ejemplar contra los petroleros de Santa Cruz que sirva de lección al conjunto de la clase obrera argentina para paralizar las luchas que se avecinan por un salario y un empleo digno. Sobre todo, les quita el sueño que los trabajadores hayan desafiado al aparato represivo burgués, cercando una comisaría y liberando a un trabajador detenido. No quieren que cunda el ejemplo y se preparan para tomarse su venganza.
Por eso es vital rodear de la máxima solidaridad de clase internacional con estos compañeros. En Buenos Aires se formó un Comité de Apoyo a los trabajadores y se están organizando manifestaciones mañana día jueves 23 de febrero en las principales ciudades del país. También se constituyó un Fondo de Huelga para apoyar a los compañeros.
Es por todo esto que desde la Corriente Marxista Internacional hacemos un llamamiento a todas las organizaciones sindicales y activistas sindicales de todo el mundo para que se solidaricen con esta lucha y envíen correos electrónicos de apoyo a la siguiente petición enviada por el Comité de Apoyo a los petroleros de Las Heras, formado en Argentina.
Solidaridad internacional con los petroleros de Santa Cruz
Los firmantes nos solidarizamos con la lucha de los trabajadores petroleros de Santa Cruz.
Exigimos el inmediato retiro de la Gendarmería Nacional y las fuerzas represivas de las áreas petroleras de la provincia. Basta de persecución y criminalización de la protesta.
Apoyamos su justo reclamo:
Devolución del salario durante los días de la huelga
Encuadramiento sindical para los compañeros adscritos al sindicato de la Construcción al sindicato petrolero
Elevar el mínimo no imponible del impuesto a las ganancias
Continuar las gestiones sobre el reclamo de jubilación con 25 años de aportaciones, sin límite de edad y el 82 por ciento móvil
Remitir la firma o la adhesión a la siguiente dirección de correo electrónico:
Por favor, envíennos copia a la dirección: elmilitante_argentina@yahoo.com.ar
También les enviamos un comunicado del Cuerpo de Delegados (Comité de Empresa) de los petroleros de Las Heras para su público conocimiento:
Comunicado del Cuerpo de Delegados de los trabajadores petroleros, Viernes 17 de febrero de 2006, Desde Las Heras.
Denunciamos que es falso lo que han declarado las autoridades nacionales sobre que la Gendarmería no participa de los operativos de requisas en el camino de los yacimientos sobre los trabajadores.
En Las Heras el Comité de Crisis conformado por la Gendarmería y por las fuerzas provinciales, no solo realizan en forma conjunta estos controles sino que además realizan recorridos en los yacimientos.
En las últimas horas la gendarmería impidió la realización de una asamblea de trabajadores en la empresa «Argentina 2000». Estos acontecimientos dejan al desnudo que la finalidad del Comité de Crisis y la presencia de la gendarmería, constituyen la aplicación de un Estado de Sitio no declarado, pero ejercido en forma conjunta por el gobierno nacional y provincial.
Se nos han suspendido los derechos constitucionales a la libre circulación, el derecho de reunión, el derecho de huelga e incluso el convenio colectivo de trabajo Nº 396/04 que permite 15 minutos diarios para asambleas.
Para imponer este régimen no dudan en despreciar no solo la vida de los trabajadores sino toda la población de Las Heras. Gendarmería y fuerzas provinciales conjuntamente patrullan los campos portando armas de fuego, algo que en forma especifica esta terminantemente prohibido por las normas de seguridad.
Hoy los delegados advertimos, que las armas de fuego en los yacimientos pueden provocar explosiones que podrían hacer volar la mitad del pueblo de Las Heras.
¿Cuántos muertos deberá haber para que se nos escuche que están poniendo en peligro al pueblo? ¿Vendrá Acevedo (Gobernador de la provincia de Santa Cruz) y el Presidente de la Nación luego a rasgarse las vestiduras?
Exigimos:
1) La inmediata restitución de nuestros derechos constitucionales.
2) La prohibición del acceso de seguridad a los yacimientos
3) El cese de inmediato de las requisas y controles sobre los trabajadores y la población