El controvertido discurso del Presidente Hugo Chávez en la conferencia de las Naciones Unidas en el miércoles 20 de septiembre en el cual llamó a Bush «el diablo» y condenó las acciones del imperialismo ha recibido una masiva cobertura por parte de El controvertido discurso del Presidente Hugo Chávez en la conferencia de las Naciones Unidas en el miércoles 20 de septiembre en el cual llamó a Bush "el diablo" y condenó las acciones del imperialismo ha recibido una masiva cobertura por parte de los medios de comunicación.
En todas las partes del mundo los puntos fundamentales del discurso fueron transmitidos y mostrados tanto en la televisión internacional como nacional y en los grandes periódicos. CNN, fox y otros grandes medios establecieron señales desde la conferencia de la ONU, para transmitir discurso en directo algo que aparte de Chávez sólo se hizo con los discursos de Bush y Mahmud Ahmadinejad ,el presidente de Irán.
Mientras muchos de los discursos que se daban en Naciones Unidas fueron los típicos y completamente aburridos acerca de la necesidad del "diálogo" y de la "ayuda humanitaria", el discurso de Chávez fue un feroz ataque contra el imperialismo y llamó la atención, no tan sólo de los observadores internacionales, sino de millones de trabajadores hombres y mujeres a lo largo del mundo.
En Caracas cientos de activistas del movimiento bolivariano acudieron a la plaza Bolívar y vieron el discurso en grandes pantallas dispuestas para la ocasión. Cuando Chávez llamó Bush "el diablo" oleadas de entusiasmo sacudieron la audiencia.
Por otro lado, la prensa burguesa en Venezuela, los jefes de la de la oposición contrarrevolucionaria y naturalmente el portavoz de la administración norteamericana condenaron el discurso en términos violentos.
El vocero de la oligarquía venezolana, El Nacional sacó un editorial el día después titulado “insultos en Naciones Unidas”, aseverando que Chávez había mostrado “lo peor de sí mismo” con ese discurso y señalando el daño que había hecho a los intereses de Venezuela y a sus gentes.
En este editorial el discurso fue retratado dos personales y mera retórica. La misma línea fue llevada por otros periódicos burgueses tales como el Tal Cual, el cual tituló el discurso como “20 minutos de fama”. Este periódico fue incluso tan lejos como para poner una caricatura de Chávez en la portada anunciandole como el verdadero diablo, a causa de que la Asamblea Nacional a decidido invertir cerca de 43 billones de bolívares en equipamiento militar.
Esto, que es un intento completamente justificado por parte del gobierno bolivariano para armarse en defensa de una posible intervención, es retratado por la burguesía como un acto de militarismo, y es comparado alargamiento de los poderes imperialistas.
El secreto detrás de la ira y el odio mostrado por la oligarquía venezolana y la camarilla de la Casa Blanca es que ellos son conscientes del hecho de que el discurso de Chávez tendrá un enorme repercusión en todo el mundo.
Una evidencia de eso, es el hecho de que el libro recomendado por Chávez en su discurso fue lanzado del 160.772 en el ranking de libros más vendidos de armazón el pasado martes al 7 y en los últimos días al 1. Esto muestra el enorme interés en las ideas de izquierdas que Chávez ha ayudado a impulsar.
Sin embargo el discurso también ha servido para profundizar los antagonismos entre el gobierno bolivariano y los Estados Unidos. Funcionarios de la administración norteamericana dijeron que el discurso no merecía ser comentado y el ex-presidente Bill Clinton dijo que Chávez había perjudicado a su propia gente y a su país con declaraciones tan radicales.
E incluso más serios que sus comentarios fue el súbito arresto del ministro de asuntos exteriores venezolano, Nicolás Maduro, el pasado sábado 22 de septiembre, que fue detenido por una hora y media en el aeropuerto de Nueva York a su regreso de la cumbre de Naciones Unidas.
Los funciona norteamericanos dijeron que el incidente fue un error y que la policía del aeropuerto no sabía que era el funcionario venezolano.
A pesar de estas declaraciones, el arresto obviamente no fue una coincidencia, sino una clara provocación por parte del gobierno de Bush. Ellos querían enviar una señal al gobierno venezolano de sus aliados a través del mundo. Chávez dijo que la acción fue un ataque directo del imperio y dijo que Maduro había sido acusado de participar en actos de terrorismo en relación a la rebelión patriótica del 4 de febrero de 1992.
En general lo que uno ve claramente en las diferentes reacciones al discurso, es la línea de clase que divide a la sociedad venezolana así como las enormes contradicciones entre los intereses del imperialismo y la revolución bolivariana. Las masas están orgullosas del Presidente Chávez debido a que él las ayudó a levantarse y denunció los crímenes de la clase dominante – aún en la boca del lobo. Las masas sienten que tienen un representante que no ha sido corrompido ni ha renunciado a la lucha.
Éste no es el lugar para entrar en los detalles del discurso de Chávez, en cual hubó algunos elementos contradictorios con los cuales los marxistas no están de acuerdo, especialmente las partes relacionadas a la reforma de la ONU. Sin embargo, cuando Chávez utiliza palabras duras para denunciar el imperialismo es debido a de que lo que dice correspondr a todos los actos criminales de represión, intervención, muerte y tortura que imperialismo lleva en Irak, Afganistán y últimamente con su apoyo al sangriento ataque e Israel a Líbano .Todo esto explica el continuo y cada vez mayor apoyo a Chávez.
Dentro de Venezuela parece que la situación se acelera. El sábado Chávez explicó de nuevo que, “alguien me dijo que él diablo había dado la orden de asesinarme”, refiriéndose al posible intento de asesinar. En otra entrevista en Panorama Digital, Chávez dijo que el mayor peligro de la revolución viene de adentro y que:
“La mayor amenaza está por dentro, hay una contrarrevolución permanente, burocrática. Soy un enemigo a diario, con un látigo me la paso porque por todos lados me azota el enemigo de una burocracia vieja y una nueva que se resiste a los cambios, tanto, que uno tienen que estar pendiente de cuando se dé una instrucción y hacerle un seguimiento para que no sea detenida o desviada o minimizada por esa contrarrevolución buracrática que está en el Estado, Èse sería uno de los elementos de la nueva fase que viene de la transformación del Estado.
El Estado se transformó a un nivel macro, pero los niveles micro se mantienen intactos, habrá que pensar ahora mismo en un nuevo paquete de leyes, transformación del marco político y jurídico hasta los niveles más micro del Estado para vencer esa resistencia.
Hermana de la contrarrevolución burocrática es la contrarrevolución de la corrupción, ésa es otra amenaza terrible, porque por donde menos se espera aparece.”
Eso es una descripción muy precisa de la lucha que está teniendo lugar dentro del aparato estatal entre los revolucionarios y los reformistas. Es muy probable que esas contradicciones, que se mostraron en la práctica en el debate sobre las expropiaciones de los campos de golf, puedan explotar de un modo más profundo en el período anterior y posterior de las elecciones del 3 de Diciembre. Eso puede ser determinante para el futuro de la Revolución.