La violencia como vicio del consentimiento

La derecha y sus diputados manipuladores continúan con la estrategia mediática de desinformación, con la perversa intención de confundir al pueblo venezolano. El Diputado William Ojeda pieza del partido Un Nuevo Tiempo, propaló una grabación según él aparentemente oculta, en donde se escucha una declaración atribuida al Presidente Hugo Chávez, realizada realmente en la respectiva rueda de prensa con fecha del 15/04/2002,  donde el Presidente cuenta una serie de pormenores vividos durante el golpe de estado (DESMONTAJE REALIZADO POR EL PROGRAMA LA HOJILLA DE VTV), en ella se escuchó lo siguiente: «…Mira Lucas: Yo he aceptado abandonar el cargo. Asi le dije. He aceptado abandonar el cargo, pero si se cumplen las condiciones que estoy exigiendo. Cuales son Primera: el respeto a la vida y la integridad física y los derechos humanos de todos quienes me acompañaron en este Gobierno…”.

Lo anteriormente transcrito,  me hace realizar una serie de reflexiones:

1.- Teniendo como base el extracto de dicha grabación, donde ubicamos la expresión «…ASÍ LE DIJE…», nos ubica ipso facto que los hechos o expresiones narradas, ocurrieron en un tiempo anterior al momento en que se efectuó la declaración traida a la Asamblea Nacional por el diputado William Ojeda, elemento de juicio fundamental para ubicarnos en la flagrante manipulación mediatica de los representantes de la derecha, que afirman que el Presidente Chávez sí renunció, además confunden desde el punto de vista conceptual, doctrinario y jurisprudencial  el «abandono» con la «renuncia», lo cual tiene connotaciones diferentes.

2.- De dicha grabación, se infieren elementos que permiten señalar que durante esos días, se ejerció violencia sobre el libre consentimiento, que en ese momento pudo manifestar el Presidente Hugo Rafael Chávez Frias y a tales efectos me permito traer a colación  la jurisprudencia de la Sala de Casación Social del Tribunal Supremo de Justicia, en sentencia de fecha 25 de septiembre de 2003, caso CANTV, con ponencia del Magistrado Dr. Alfonso Valbuena Cordero, en relación al vicio en el consentimiento, en la cual se señaló: “…esta teoría no está restringida al sólo campo de los contratos, sino que ella es aplicable a todos los negocios jurídicos, es decir a todos aquellos actos voluntarios del hombre que producen efectos jurídicos que dependen de la manifestación de la voluntad…»;  para mayor ilustración me permito parafrasear  la doctrina plasmada en los libros  «Violencia, Error, Dolo. La teoría de los Vicios del Consentimiento en la Legislación Venezolana» del Dr. José Melich Orsini y «Curso de Obligaciones» de Eloy Maduro Luyando, cuando se refieren a la VIOLENCIA como VICIO DEL CONSENTIMIENTO, en ellos señalan, que la misma es toda coacción de tipo físico o moral que produzca una impresión tal sobre una persona sensata, que llegue a inspirarle un justo temor de exponer su persona o bienes a un mal notable, destinada a obtener su consentimiento a fin de que celebre determinado contrato.

3.- La coacción, la violencia y la presión política que ocurrió durante el golpe del 2002, ejerció el respectivo acoso sobre el Presidente Constitucional de la República Bolivariana de Venezuela Hugo Chávez, lo cual hizo anulable cualquier tipo de manifestación del consentimiento que para ese momento hubiese realizado nuestro Presidente, tal como la decisión de abandonar el cargo de Presidente, debido al lógico y natural temor de que su persona, sus colaboradores inmediatos perdieran la vida, se les agrediera en su integridad física y/o se les violara sus derechos humanos, como estaba ocurriendo en las detenciones arbitrarias, inconstitucionales e ilegales, realizadas por el fascista y fugaz régimen de facto de Carmona Estanga.

4.- Dicha grabación, lo que realmente confirma y demuestra, es que efectivamente hubo un golpe de estado, ya que un Presidente electo democráticamente, en su vigente período constitucional, fue coaccionado, presionado por factores de la derecha y sus secuaces a entregarse y a abandonar su cargo, y el Comandante Chávez de manera prudente optó por evitar un derramamiento de sangre en nuestro país. Sabia decisión, ya que en el fondo sabía que el pueblo no estaba dormido y que reaccionaría al enterarse de la verdad, tal como sucedió el 13 de abril de 2002.

 

Por eso es que la verdad es pesada y la mentira es ligera, cada vez que pretendan los representanes de la derecha y sus lacayos, manipular al pueblo se levantarán las voces conscientes para desmontar la canalla mediática. La verdad nos hará libres. Por manipuladores NO VOLVERÁN.