A la una y media de la madrugada se anunciaron los resultados de las elecciones sindicales en SIDOR, la enorme planta siderúrgica ubicada en la ciudad de Puerto Ordáz (Guayana, Edo. Bolívar). En una contienda caracterizada por un margen muy reñido entre los candidatos, resultó reelegido como presidente del SUTISS (Sindicato Único de Trabajadores de la Industria Siderúrgica y Sus Similares (Sutiss), José Luís Hernández del Movimiento Revolucionario Orinoco.
El resultado final, publicado por la comisión electoral, dan estas cifras para los tres candidatos principales:
José Luís Hernández (Movimiento Revolucionario Orinoco). Plancha 11: 1.555 votos (29,51%)
José Meléndez (Alianza Sindical/Marea Socialista). Plancha 2: 1.469 votos (21,42%)
Acarigua (Militante Siderúrgico). Plancha 9: 1097 votos (14,22%)
Participación electoral: 5.269 (91,7%).
Una gran mayoría revolucionaria
Lo primero que debemos resaltar es que las dos planchas más votadas, la número 11 y la número 2, son ambas pertenecientes al Partido Socialista Unido de Venezuela. Sin contar otras planchas que se definen como revolucionarias, de un total de once contendedores en estos comicios, nada mas las dos más votadas dan una mayoría de 50,93% del voto total.
Esto muestra que los trabajadores de SIDOR, independientemente de su preferencia por alguna de las dos planchas, son claramente revolucionarios, y contrarios a cualquier corriente opositora. Además muestra un respaldo enorme a la nacionalización de la planta, que desde la heroica lucha en el 2008 ha estado en manos del estado, dignificando la vida de los trabajadores y consiguiendo mejoras substanciales en toda una serie de áreas sociales y económicas.
Los sidoristas saben que la defensa de la revolución significa la defensa de las conquistas palpables que se han obtenido y por este motivo el fuerte rechazo a cualquier pretensión de volver al pasado bajo la transnacional, con todo lo que ello implicaba en ataques contra la clase obrera.
Se disminuyó la ventaja de Hernández
El ganador de estas elecciones, José Luis Hernández, ha sido elegido como presidente del sindicato por segunda vez. Su movimiento está vinculado al PSUV, pero algunos lo han sido criticado en su gestión como presidente, pues opinan que no ha tenido la suficiente autoridad para defender sus reclamos.
Todo esto explica que el margen con que ganó estas elecciones del 2011 fue muchísimo menor comparada a su primera victoria en el 2008; Para entonces el movimiento 11 adelantó en 200 por ciento al movimiento de la plancha 2; y en 301 por ciento al equipo de la 9. Pero anoche esta ventaja fue reducida a 5,53 por ciento a la plancha 2 y 29,45 por ciento a la plancha 9.
De hecho, la contienda esta vez estuvo tan reñida, que se estaba guardando emoción hasta el conteo, a las 11PM, de los votos en Laminación en Caliente, dónde Meléndez arrasó, y luego en Tavsa (Tuberías de Acero de Venezuela), dónde unos votos a Acarigua dejaron paralizado el voto de Meléndez y dando la victoria final a Hernández con tan solo 51 votos.
Un rechazo a la burocracia
Hay que decir también, que la reelección de José Luís Hernández representa un fuerte rechazo de la masa trabajadora al intento por parte de la burocracia reformista existente dentro del gobierno por meterse en las elecciones y favorecer a un candidato particular.
Alianza Sindical, vinculado a la Corriente del PSUV «Marea Socialista», es un colectivo que sin duda tiene muchos luchadores honestos, revolucionarios comprometidos que quieren luchar por un cambio genuino de la sociedad. Sin embargo, el papel que desempeñó su dirección en esta contienda ha sido muy lamentable.
Además de enfrentar a la dirección de la empresa, presidida por Carlos d’Oliveira, que está intentando formar los consejos de trabajadores y trabajadoras en cada departamento e ir implementando el Control Obrero, los dirigentes de Alianza Sindical guardaron silencio y no fijaron ninguna posición político clara al respecto, cuando en el mes de junio fue detenido el llamado «rey de la cabilla», Luís Velásquez, quien estaba liderizando una red mafiosa a través de su cargo como gerente de comercialización.
A tan solo una semana de las elecciones, José Meléndez y Cruz Bello de Alianza Sindical se reunieron con el vice-presidente Elías Jaua, el Ministro del MIBAM José Khan y la Ministra del Trabajo María Cristina Iglesias, para «discutir las deudas pendientes con los sidoristas». De dicha reunión fue publicada en Aporrea una foto junto a ellos, donde mostrandose efectivamente como los representantes oficialistas en los comicios.
La burocracia pensaba que una simple concesión económica, los 33 meses del retroactivo del tabulador, iban a ser suficiente para que ellos pudieran imponer el candidato que ellos preferían a la presidencia del SUTISS. Pero contrario al mito que existe, los trabajadores de Guayana no son simplemente «luncheros», pues saben que la burocracia no le hace un favor a nadie gratuitamente.
A profundizar el Control Obrero
En una entrevista que publicamos recientemente con el camarada trabajador-presidente de ALCASA Elío Syago, este reveló como hay una campaña sostenida y continua por parte del ministro de MIBAM, junto a la ministra del trabajo y el canciller, contra el control obrero en la región. En este contexto, es extremadamente grave que José Meléndez haya cedido a entrar en el juego de los mismos individuos que están saboteando el Control Obrero. Esto fue exactamente lo que le costó la victoria.
La única manera de profundizar el Control Obrero es a través de la democracia revolucionaria desde abajo. Se hace urgente la extensión a toda SIDOR de los consejos de trabajadores y trabajadoras y el fortalecimiento de las asambleas para discutir los problemas existentes en la planta.
Para romper el cerco, es necesario además vincular la lucha por el Control Obrero en Guayana a la lucha por la radicalización de la revolución. La clase obrera necesita organizarse dentro del Gran Polo Patriótico, y sobre todo dentro del PSUV, para levantar sus propias consignas y programa, a fin de recuperar estos espacios como verdaderas herramientas para la lucha revolucionaria.
Si sigue el sabotaje burocrático contra el Plan Guayana Socialista, estará seriamente en peligro el cumplimiento de la Gran Misión Vivienda Venezuela y por ende la propia reelección del Presidente Chávez el 07 de octubre del 2012. Los trabajadores, con Guayana a la vanguardia, lucharán con toda la energía y sacrificio para impedir semejante desenlace.