Publicamos este panfleto como aporte al debate que se está realizando en las filas del chavismo, para que sea usado públicamente. Con lo que consideramos, las lecciones más importantes que se pueden obtener de esta derrota electoral. La revolución aún no está derrotada, por el contrario, esta es una oportunidad para reoxigenar al proceso revolucionario, y que salga mucho más airoso de este revés temporal. Con el fortalecimiento del poder popular y la salida de todos los reformistas y burócratas enquistados en el gobierno Bolivariano, y que lo han venido destruyendo desde adentro.
¿Qué lecciones sacar de esta derrota?
- La oposición ha logrado ganar producto de su campaña para acercar el voto del chavista descontento. Por lo tanto esta victoria no es por mérito propio de las fuerzas de la oposición, sino por el contrario de la debilidad del chavismo. Sin embargo, las políticas que implementarán los opositores para complacer a sus caudillos burgueses, harán que estos sectores se regresen al chavismo dejándoles en minoría de nuevo. Es una postura equivocada y peligrosa satanizar a quien no votó por los “candidatos de la patria”, ellos podrán decidir a futuro la derrota o no de las próximas elecciones.
- Los burócratas y reformistas, así como algunos sectores de las masas influenciados por los primeros, han culpado de la derrota al “bajo nivel consciencia de las masas”, incluso cuando días antes alardeaban del “alto nivel de consciencia del pueblo venezolano”. Esto tan sólo demuestra la total desconexión de estos “líderes” frente al pueblo chavista. En realidad, estos sectores tratan de desviar la atención de la vanguardia crítica, ante sus propias responsabilidades. Atendiendo a la raíz del problema, la culpa no es de quienes fueron desgastados por la guerra económica, el burocratismo, el nepotismo y amiguismo, la corrupción, el reformismo y la conciliación de clases, sino de la dirigencia que permitieron el surgimiento y continuidad de estos males. Es decir, la responsabilidad es totalmente de la dirección del gobierno bolivariano y el PSUV por no estar a la altura de lo que las masas revolucionarias les demandan.
- Esta derrota, no es una muestra del fracaso del socialismo, sino de la ingenuidad de pretender hacer convivir pequeños oasis de socialismo, en un inmenso mar de capitalismo, o peor aún, de esperar contar con algún sector de la burguesía “nacionalista” o democrática para construirlo. Fue y es ingenuo esperar que la burguesía y el imperialismo se hagan a un lado, mientras se les va ganando terreno en el plano social, político, y económico. En Chile como en Nicaragua, donde se nacionalizó importantes sectores estratégicos de la economía, también se dejó intacto el resto del poder económico de la burguesía, y esta uso el poder hasta donde pudo, para destruir ambos gobiernos revolucionarios. Por el contrario en Cuba, donde se aplastó todo el poder de la burguesía y el imperialismo, la revolución no sólo pudo transformar la sociedad en total tranquilidad, sino que además se ha logrado mantener más de 50 años sin un sabotaje a la producción.
- No se puede hacer una revolución a medias. O se derroca el poder económico de la burguesía, nacionalizando la banca y las principales palancas de la economía y poniéndola bajo el Control Obrero, o la burguesía sabotea la economía con la propiedad de los medios de producción en sus manos y retoma el poder político. No se puede pretender golpear a los burgueses con medidas socialistas, nacionalizando algunos sectores importantes, pero dejar el resto de la economía en manos privadas, incluidos sectores estratégicos como la producción/importación de alimentos y medicinas, así como de su distribución. Esta política sólo puede generar una reacción contrarrevolucionaria de parte de los burgueses que controlan el resto del poder económico, incluso de aquellos que públicamente se hacen llamar bolivarianos, pero que de espaldas al gobierno también sabotean la economía. Esta es la razón del surgimiento de la guerra económica, no es producto sólo de las malas intenciones de algunos empresarios, sino de la defensa de los intereses de clase de todos ellos, los cuales son comunes en toda la burguesía.
¿Qué debemos hacer?
- Apoyo al Presidente Maduro frente a la arremetida de la burguesía y de los sectores reformistas que se resistirán a la rectificación por venir.
- Luego de solicitados todos los cargos de ministros por el presidente Maduro, estos deben ser elegidos por mandato popular.
- Se debe investigar a todos los funcionarios que han atentado contra los intereses de los trabajadores saboteado la organización de la clase trabajadora.
- Organizar asambleas populares en cada barrio, en cada fábrica, en cada institución del Estado y en cada liceo y universidad, para la conformación de comités para la defensa de las conquistas revolucionarias que la nueva Asamblea Nacional Intentará arrebatarnos.
- Defensa de las conquistas laborales establecidas en la LOTTT. Asumir un compromiso total de movilización y lucha si intentan derogarla.
- Exigir un Salario Digno – Contra la especulación, escala móvil de salario.
- Estabilidad laboral – acabar con la tercerización ya.
- Aprobación, vía Ley Habilitante antes del 31 de diciembre la ley de los Consejos Socialistas de Trabajadores/a para impulsar el Control Obrero.
- Por la defensa y reimpulso de las empresas nacionalizas y ocupadas. Elevar la producción si – Devolverlas jamas.
- Destitución e investigación de funcionarios ineficientes, corruptos y saboteadores del Control Obrero.
- Nacionalización de la banca y el comercio exterior, ni un dolar mas pa’ la burguesía.
- Por la salud y seguridad laboral. A Defender la LOPCYMAT. Delegados y delegadas de prevención y toda la clase trabajadora a tomar la asamblea nacional si intentar derogarla.
- Contra la corrupción, el burocratismo y la ineficiencia, OLP Trabajador, para sacar de la administración pública a los saboteadores enquistados.
- Por una universidad popular y democrática, garantizar el voto igualitario y defender el acceso del pueblo a la educación gratuita y de calidad, Aprobación, vía Ley Habilitante antes del 31 de diciembre de una nueva ley de universidades.
- Convocar un nuevo congreso del PSUV, con nuevos delegados elegidos realmente por la base. Para la revisión de los estatutos del partido y elección directa por las bases de una nueva dirección nacional del partido.
- No es tiempo de sectarismos, unidad lucha, batalla y victoria.
¡Construyamos la corriente marxista del PSUV!
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