Entrevista a la compañera Isabel Granado, dirigente campesina del Edo. Mérida, detenida recientemente por las FAES

La tarde del día de ayer, jueves 24 de septiembre, el movimiento campesino volvió a ser víctima de la represión, hostigamiento y judicialización estatal. Esta vez le tocó a la dirigente campesina Isabel Granado, quien además en este momento es candidata voto lista por la Alternativa popular Revolucionaria en el estado Mérida. La compañera fue detenida por las Fuerzas de Acciones Especiales (FAES) y estuvo detenida por varias horas en la sede de la PNB, en El Vigía.

Isabel Granado es vocera del consejo campesino la mano poderosa de Dios, y venía denunciando desde hacía más de un año al respecto de reiteradas amenazas de desalojo contra más de 300 familias campesinas, que hacen vida dentro del predio El Trompillo, ubicado en el municipio Alberto Adriani, Edo. Mérida. De hecho, meses atrás se intentó montar un falso positivo contra las familias que ocupan el predio, alegando supuesta presencia paramilitar en el mismo, a fin de justificar política y legalmente el desalojo de las familias que ocupan el predio.

A continuación, publicamos la entrevista que realizamos el día de hoy, viernes 25 de septiembre, en horas de la tarde, a la compañera Isabel Granado, sobre las causas de su detención, su participación en la APR, y la lucha que están llevando adelante las familias que ocupan el predio El Trompillo.

LdC: ¿Cuánto tiempo llevan dentro del predio, tienen alguna adjudicación de las tierras?

I.G.: Buenas tardes compañeros, tenemos aproximadamente un año y tres meses de estar dentro de los terrenos en la lucha con el consejo campesino la mano poderosa de Dios, y, por engaño y manipulación de algunos funcionarios del INTI, no logramos tener la adjudicación de tierras. En realidad fuimos un consejo campesino que los funcionarios usaron como conejillos de indias, para pedir un rescate de esas tierras a los terratenientes.

LdC: ¿Cómo ocurrieron los hechos de ayer?

I.G.: Ayer 24 de septiembre, a eso de las 4:30 de la tarde, yo me encontraba en mi residencia con mis tres hijos menores de edad, cuando fui interceptada por una camioneta Ford Runner 4 puertas, color gris, de donde se bajaron cinco funcionarios del FAES, totalmente encapuchados y armados, y me hicieron ingresar a una camioneta a punta de amenazas y amedrentamiento.

Para evitar que mis hijos vieran eso, como hubiera hecho cualquier otra madre les pedí que dejaran montarme en la camioneta de forma tranquila, sin que me esposaran, para que mis hijos no vieran eso. Claro, sin dejar de resaltar que golpearon a mi hija, la tiraron al suelo, la maltrataron, una niña de apenas 9 años.

Así fue como me trasladaron a la sede del FAES en El Vigía, donde estuve aproximadamente sólo 5 minutos, allí me cambiaron de camioneta. Esa primera camioneta en la que fueron a buscarme era posiblemente propiedad del terrateniente. Entonces, me trasladaron y me llevaron a la Policía Nacional Bolivariana, donde estuve retenida hasta las 12:00 de la noche aproximadamente, cuando desde Caracas, todo el movimiento de la APR, los contactos que se hicieron, y la presión de todos los compañeros que luchan por la misma causa, ayudaron a que desde allá se lograra mi liberación.

LdC: ¿Bajo qué cargos se la llevan detenida?

I.G.: Los funcionarios señalaron que tengo una orden de aprehensión por invasora, delito que no tiene fundamento porque no soy invasora, tenemos un documento de rescate emitido por la oficina Regional de tierras (ORT) Mérida, aunque este rescate no fue más que agarrarnos de conejillos de indias, pero, tenemos un rescate y somos un consejo campesino que no es que se despertó un día con querer molestar a alguien, sino un consejo campesino que entró a hacer un rescate sobre un rescate que ya había sido pronunciado por la ORT central.

Luego, cuando estoy detenida me imputan 7 delitos más, entre ellos agavillamiento, aprovechamiento de ganado, robo de maquinaria, muchísimos otros cargos que ahora mismo no los recuerdo, precisamente porque de verdad fue una noche muy traumática, fue una tarde muy confusa, me trataron como si fuese una delincuente, personas apuntándome con fusiles, con FAL.

Ese trato no se lo dan ni a los peores delincuentes, lo hacen es con una persona que quiere trabajar la tierra, con una madre venezolana que solamente quiere sacar a sus hijos adelante con esfuerzo y trabajo.

LdC: ¿Piensa usted que por ser candidata de la APR, exista persecución política contra su persona?

I.G.: Claro que sí, la persecución a los candidatos de la Alternativa Popular Revolucionaria se está viendo constantemente desde que se anunció esta propuesta. Todos no pensamos igual, cada quien piensa diferente, en un hogar por más que seamos familia, seamos hijos de los mismos padres, tenemos derecho a pensar diferente.

Eso es lo que pasa acá, pues somos revolucionarios, de igual forma, pero pensamos diferente, queremos ser una alternativa, porque la gente está cansada y pues nosotros queremos darle la oportunidad de que se vayan por esta alternativa y que sean ellos, que tengan un candidato igual a ellos, un candidato que come con el mismo sueldo que no alcanza para nada.

Un candidato al que también se le va la luz, un candidato que también cocina en leña, un candidato que sufre y padece tal cual lo que cualquier persona de a pie, porque hay que vivir en esta situación que estamos ahorita, para poder defender y sacar este país adelante.

Si vivimos donde hay luz, donde hay agua, donde no sufrimos nada y tenemos una fortuna en la cuenta bancaria, es mentira, no sabemos ni a qué vamos a la AN, ni qué vamos a representar, tenemos que venir de abajo, tenemos que venir de las bases para saber por qué y  para qué vamos a trabajar y sí, sí me parece que fue por esto, porque somos una alternativa popular, y por eso nos amedrentan y nos acosan, para desarticularnos.

Te confieso que si no es persecución política, el tipo de persecución que sea es muy grave, y muy grande lo que está pasando. Somos seres humanos, soy una madre más, que sufre y padece y no porque yo me esté postulando, porque me estén postulando para un cargo por una Alternativa Popular Revolucionaria, que solamente lo que quiere es darle una opción al pueblo venezolano, para salir y tener candidatos, representantes que de verdad hagan algo por el pueblo, no solamente es por eso, también es por el tema de la tierra, el tema de que no les gusta que les toquen sus intereses, y al verse amenazados y acorralados han buscado la manera de hacernos la vida imposible a los dirigentes, tanto campesinos, como dirigentes sociales, sindicalistas, los trabajadores, a todos los que tengamos un pensamiento diferente, parece que nos quieren eliminar, que nos quieren desaparecer.

LdC: ¿Compañera, por qué tomó la decisión de presentarse como candidata por la APR?

I.G.: Porque quiero seguir los lineamientos de la revolución. Porque creo en el legado del comandante Chávez. Porque quiero trabajar por mi pueblo, porque quiero trabajar por mi municipio, porque quiero trabajar por mi parroquia, porque quiero trabajar por mi país. Y precisamente porque quiero trabajar por todas esas mujeres y por todos esos campesinos que son callados y a los que se les vulneran sus derechos. Por eso me postulo ante la Asamblea Nacional como candidata por la alternativa Popular Revolucionaria.

¿En qué condiciones la liberaron? ¿Tiene cargos?

La cosa es que me liberaron prácticamente a escondidas. Me sacaron algunos funcionarios, me resguardaron, pues se les ablandó el corazón, resguardaron mi integridad, me sacaron a escondidas, me entregaron mis documentos y me dejaron allí, donde pudiese yo refugiarme y amanecer. Esa fue la condición. Y si quedé con cargos hasta los momentos que me dieron la liberación, no debí haber quedado con cargos, pero al pedir la recaptura puedo pensar que dejaron algunos cargos que ellos quieran imputarme, por eso dicen a querer recapturarme.

Nota: Hacia el final de la entrevista, tuvimos conocimiento de que fue emitida una nueva orden de captura contra la compañera, así como contra otros camaradas que hacen vida en el movimiento campesino en el Edo. Mérida, en particular, contra el compañero José Monterrosa, que aún y cuando lleva alrededor de un mes detenido, fue incluido en dicha orden de captura.

Desde la Corriente Marxista Lucha de Clases, como parte de la Alternativa Popular Revolucionaria, hacemos un llamamiento a la solidaridad del movimiento obrero y de la izquierda revolucionaria con los compañeros y compañeras de El Trompillo, así como del movimiento campesino en general, que en la actualidad está enfrentando una represión cada vez más severa e implacable por parte del Estado, con el fin de derrotarles en su lucha y entregar sus tierras nuevamente a manos de terratenientes.