El pasado martes 25 de mayo del corriente, en la ciudad de Maracaibo, Estado Zulia, fueron detenidos el camarada Luis Valles y otros cuatro dirigentes obreros que han venido ejerciendo la lucha sindical en la región, a saber: Richard Eduardo Ortega Castro, Jean Carlos Bracho Navarro, Eduardo José Barroso y José Guerrero.
Compañeros de Lucha de Clases que han acompañado el trabajo sindical del camarada Valles, tuvieron conocimiento de que los compañeros detenidos se encontraban en los alrededores de una obra en construcción acompañando a sus trabajadores, debido a que la empresa encargada de ejecutarla ha venido violando sus derechos en materia de medidas de bioseguridad, que todo empleador debe garantizar a fin de evitar potenciales contagios por Covid-19.
Ante ello, la empresa utilizó a los cuerpos de seguridad del Estado, específicamente a las fuerzas especiales de la Policía Nacional Bolivariana, mejor conocidas como FAES, quienes de manera arbitraria y sin que existiese delito alguno, realizaron la detención del camarada Luis Valles y de los otros cuatro compañeros. A los 5 compañeros se les imputa el delito de asociación para delinquir.
Ahora bien, es muy bien conocida entre la izquierda militante revolucionaria del Zulia, el carácter clasista de la lucha sindical que ha mantenido el compañero Luis Valles desde el año 1998, en defensa de los derechos de los trabajadores y trabajadoras en el ramo de la construcción. Precisamente, sobre la base de tales méritos y no de palancas o maniobras burocráticas -en las que muchos dirigentes sindicales patronales son expertos-, es que el camarada Luis Valles ha asumido el cargo de vicepresidente de la Federación Nacional de la Construcción y vicepresidente de la Central Bolivariana Socialista de los Trabajadores en el Estado Zulia.
En conformidad con su responsabilidad sindical en la región, el compañero se encontraba en el momento y lugar de los hechos exigiendo el cumplimiento de la convención colectiva y de la normativa laboral correspondiente, en lo que respecta al ingreso del personal afiliado a la representación sindical-federativa.
La detención arbitraria de estos compañeros, nuevamente pone en evidencia la política sistemática del aparato de Estado burgués, pero también del gobierno, de reprimir, criminalizar y judicializar las luchas sindicales en el país.
Esta nueva detención -que se suma a las más de cien detenciones arbitrarias de trabajadores, efectuadas en los últimos años-, resulta totalmente inaceptable, en tanto es absolutamente carente de fundamentos legales. Por tal razón repudiamos de manera categórica esta detención ilegal, así como también, que se utilicen los recursos del Estado y los cuerpos de seguridad para amparar a los grupos burgueses y patronales de la región y del país. Con tal actuación, el gobierno funge como furioso guardián y protector del enriquecimiento de las clases dominantes, aún y a costa del sufrimiento de la clase trabajadora que acude a su faena diaria en las peores condiciones de bioseguridad, y sin cumplimiento alguno de las contrataciones colectivas, cuando existen.
Desde Lucha de Clases, sección venezolana de la Corriente Marxista Internacional, exigimos en primera instancia, el derecho al debido proceso con transparencia y claridad, que se respeten los derechos fundamentales del camarada Luis Valles y de los otros compañeros de lucha detenidos, consagrados en nuestra Constitución. Exigimos que se respete el derecho a la presunción de inocencia, hasta que se demuestre lo contrario, así como el derecho a la defensa y a la oportuna asistencia jurídica. De igual forma, exigimos el cese al hostigamiento y persecución contra la dirigencia obrera clasista de todo el país.
Por último, hacemos un llamado a nuestros hermanos de clase obrera a cerrar filas, a organizarnos, unirnos y formar un solo puño, para enfrentar las embestidas de la nueva capa burguesa incrustada en el poder, que otorga concesiones a burguesa tradicional y ampara al patrón empresarial explotador, para que exprima cada día más a los trabajadores y trabajadoras. Nuestro enemigo real es de clase, y por lo tanto la salida a la crisis actual tiene que ser revolucionaria.
¡Libertad inmediata para Luis Valles y todos los compañeros detenidos arbitrariamente!
¡Por un gobierno de los trabajadores!
¡Viva la clase obrera!