Condena de la CMR al brutal asesinato del compatriota Danilo Anderson y análisis de este asesinato en el contexto actual de la revolución. ¡Basta de impunidad¡ Llevemos la revolución hasta el final para derrotar a la oligarquía y los fascistas A finales de la noche de ayer fue asesinado el fiscal especial Danilo Anderson en Caracas. Al parecer, el compatriota Danilo se trasladaba a última hora de sus estudios de postgrado. Mientras conducía su vehículo a la altura de la Av. Ciencias con calle Vargas en Los Chaguaramos, al sureste de Caracas, una bomba estalló bajo el asiento de su carro calcinando al fiscal Anderson.Tras la explosión el carro fue a empotrarse frente a un edificio.

Este asesinato es un intento de la contrarevolucion de frenar el proceso de enjuiciamineto y castigo a los golpistas que durante el golpe de abril de 2002, al frente de las cuales estaba el compatriota Danilo. Danilo tenía el propósito de imputar a las 400 personas que firmaron el decreto de Carmona Estanga en el que éste se proclamaba presidente. Al mismo tiempo, este hecho es un mensaje al conjunto del pueblo revolucionario de que los contrarevolucionarios no han sido derrotados tras el 15 de agosto y el 31 octubre, que continúan conspirando y que les es posible seguir golpeando la pueblo revolucionario.

Rápidamente dirigentes de AD, Copei y Primero Justicia, han condenado el atentando, incluso Capriles Radonski, uno de los "cuello blanco" imputado por Danilo Anderson, se ha mostrado "indignado" ante este asesinato y ha tenido la desvergüenza de presentarse en la morge a dar el pesame a los familiares. Este provocador, que hoy frente a las camaras de televisión llama a la reconciliación y en contra de la violencia, es el mismo que hace dos años durante el golpe de estado estuvo al frente de las hordas fascistas que intentaron asaltar la embajada cubana.

¿Quienes fueron los autores del asesinato? Todavía no se sabe, pero está claro a quién beneficia, a todos aquellos que podían ver peligrar su libertad con la acción del compatriota Danilo, es decir, la cúpula contrarevolucionaria que podía acabar con sus huesos en la cárcel y que estuvieron junto a Carmona el 11 de abril y posteriormente promovieron el paro petrolero. Ahora se lavan las manos e hipócritamente se lamentan del crimen.

El asesinato de Danilo prueba que la revolución no puede confiar en las palabras de reconciliación de los contrarrevolucionarios

El pasado lunes el vicepresidente Rangel y altos cargos del Gobierno bolivariano se reunieron con la directiva de Fedecamaras, encabezada por Albis Muñoz, una reconocida golpista que iba a ser imputada por Danilo Anderson.

En esa reunion todo fueron buena palabras por parte de los antiguos golpistas. Por ejemplo, el presidente de Fedecamaras Zulia se desmarcó respecto a la que los empresarios del país estuvieran vinculados con la desestabilización del país."Voy a usar las mismas palabras del del vicepresidente hoy: no podemos estar mirando hacia atras y ver el retrovisor para buscar las cosas del pasado".Según el diario burgués Últimas Noticias, en su edición del 16 de noviembre, "los representantes de las cámaras regionales que asistieron al encuentro coincidieron en la necesidad de pacificar el país, y en este sentido solicitaron que se abra un proceso de anmistía".

Solo profundizar la revolución hacia el socialismo puede garantizar el triunfo definitivo de la revolución

En la reunión del fin de semana, el presidente Chávez habló de profundizar la revolución dentro de la revolución, de que el capitalismo no podría resolver la miseria, e implementó un plan para superarlo. Evidentemente, esta reunión y las declaraciones en los estados Vargas y Táchira en la misma línea, llamando a ocupar las tierras si los latifundistas no las entregaban así como a expropiar las fabricas cerradas, hizo que en Fedecamaras sonaran las alarmas. Y en la reunión del lunes sacaran el compromiso del vicepresidente Rangel en el sentido que "hizo énfasis en la promesa del gobierno a través de quien aseguró que se respetará la propiedad privada" (Últimas Noticias). Como dijo más tarde frente a las cámaras de televisión Albis Muñoz, presidenta de Fedecamaras y conocida golpista (firmó el decreto de Carmona Estanga y estaba entre los imputados por Danilo Anderson) "el gobierno no tenía ninguna intención estatatizante".

La oligarquía capitalista y sus representantes, como no pudieron aplastar por la fuerza el proceso revolucionario, ahora tratan de paralizar su profundización con buenas palabras, hablando de diálogo y de no mirar atrás. Al mismo tiempo en la práactica intentan destruir el proceso revolucionario y continúan con su política de violencia contra el pueblo revolucionario y sus dirigentes. Es la vieja tactica del imperialismo y de la burguesia del palo y la zanahoria. El asesinato del compatriota Danilo Anderson es una advertencia para la revolucion bolivariana. Si los golpistas siguen impunes andando por las calles, si siguen teniendo en su dominio las fábricas, los bancos y la tierra, es decir, su fuente de financiación económica y de poder, y, al mismo tiempo, siguen manteniedo posiciones en el seno del aparato del Estado, podrán SEGUIR CONSPIRANDO CONTRA LA REVOLUCIÓN y podrán volver a golpear de nuevo. Ya lo decía el gran General Ezequiel Zamora, cuando declaraba que a los oligarcas hay que dejarlos en camisa, porque con su fortuna hacen la guerra al pueblo. Ayer fue Danilo Anderson, mañana puede ser cualquier revolucionario, incluido el mismo presidente Chávez.
La mejor manera en que el pueblo revolucionario, la clase trabajadora y los sectores populares podemos reivindicar la memoria del compatriota Danilo Anderson es acabar la obra que la reacción le impidió acometer: limpiar las calles de la República Bolivariana de contrarrevolucionarios. Sólo la organización democrática de los trabajadores y los sectores populares, profundizando las misiones y los núcleos de desarrollo endógeno, tomando bajo su control las empresas, las tierras y los asuntos del Estado, arrebatándole a la oligarquía y al imperialismo las fuentes de su poder podrán garantizar plenamente el futuro de la revolución bolivariana y proteger verdaderamente el proceso bolivariano de la violencia de los contrarevolucionarios.

Defendamos la revolución de la violencia de la oligarquía expropiando a los capitalistas y completando la revolución avanzando hacia el socialismo.