Un grupo de camaradas de Mérida, tras decidir fundar la célula d ela CMr en la ciudad, envían este aporte con algunas de sus conclusiones sobre el debate entre reforma o revolución que se da en estos momentos en el seno del movimiento bolivariano y e La Corriente Marxista Revolucionaria (CMR)es una organización política creada en diciembre de 2003 tras la fusión de El Topo Obrero y El Militante como sección venezolana de la Corriente Marxista Internacional (El Militante/In Defence of Marxism). La CMR se acaba de crear en el estado Mérida en el marco de la estrategia organizativa revolucionaria de expandirnos por los estados de Venezuela en el contexto de la Revolución Bolivariana.

Nuestro objetivo es contactar con las masas protagonistas del proceso, con el objetivo de hacerles llegar mediante nuestro periódico y materiales de formación las ideas del marxismo como instrumento necesario para la transformación de la sociedad en beneficio de la clase trabajadora, obrera o rural, empleada o desempleada. Es decir, queremos explicar que sin socialismo no hay revolución posible, y que por tanto se mantendrán las condiciones que generan la pobreza y la desigualdad.

Dichas condiciones no son otra cosa que el modo de producción capitalista sustentado en la existencia de la propiedad privada de los medios de producción. Mientras exista dicha propiedad habrá capitalistas nacionales o extranjeros que quieran reproducir su capital, para lo cual necesitarán alquilar fuerza de trabajo sin la cual no es posible producir absolutamente nada. Este hecho mismo es el que genera la desigualdad social por un lado, pero por otro lado genera el desempleo , pues al no haber una planificación democrática de la economía el empleo depende de la oferta de fuerza de trabajo en el mercado.

Todo ello se agrava si tenemos en cuenta la posición de Venezuela en la división internacional del trabajo, que al igual que Latinoamérica, sigue vendiendo materias primas baratas, e importando productos manufacturados, con lo cual no se desarrollan las fuerzas productivas capaces de crear riqueza y empleo.

Ante esta situación hay dos propuestas sobre la mesa; una las están propugnando los sectores reformistas, que proponen volver a las políticas ISI,( industrialización por substitución de importaciones) establecidas tras la crisis del 29 y que no fueron capaces de resolver los problemas estructurales de América Latina. De hecho por eso fueron abandonándose en los 80 , con la crisis de la deuda y las presiones del FMI, entre otras cosas, porque para desarrollar Latinoamérica en sentido occidental había que importar tecnología cara que pudiera modernizar los medios de producción, para lo cual se tuvieron que pedir préstamos interminables que desembocó en la crisis de los 80.

Este modelo desarrollista que descansaba en las espaldas de los trabajadores es la propuesta que se está viendo venir de manos de los reformistas de “izquierda” influenciados por la llamada tercera vía europea, como Lula, Kirchner o Tabaré Vázquez. Realmente, ¿ esta propuesta puede resolver los problemas de América Latina? Ya vimos que no, tendría que cambiar América Latina de posición en la división internacional del trabajo. Es decir, tendría que convertirse en un centro de poder, capaz de producir productos manufacturados competitivos y modernos y necesitaría un mercado para que los pudiera colocar, que no puede ser otro que el interno ya que el externo ya está bastante copado por las potencias imperialistas

En un mundo dividido en grandes bloques comerciales bajo el dominio de cada potencia imperialista esto es imposible. Cada una d elas grandes potencias utiliza toda su musculatura económica, polìtica y en determinados momentos incluso la militar para proteger sus mercados y conquistar nuevas áreas de influencia. Las débiles, atrasadas y paràsitas burguesìas latinoamericanas no pueden competir con esos poderes imperialistas. Es más, dependen de la estabilidad global del sistema y de hacer negocios con las grandes transnacionales y potencias imperialistas para mantener sus beneficios.He ahí la causa principal de que hayan sido incapaces de unificar América latina y desarrollarlaen más de 200 años. Es imposible unificar Latinoamèrica bajo el capitalismo y solucionar los graves problemas que padecemos los distintos pueblos.

Por todo ello, la única vía posible para crear una sociedad donde reine el estado de la libertad por encima del de la necesidad, es instaurar el sistema socialista. Este sistema aboliría el sistema de propiedad privada de los medios de producción y así a las clases sociales que se derivan de ello, muriendo por tanto el Estado como tal, ese Estado garantizador de los privilegios de la burguesía y creándose un Estado gestionador del nuevo modo y de las nuevas relaciones de producción derivadas de la socialización de los mismos. Es decir, un sistema basado en la libre asociación de productores que planificado democráticamente asegure disfrutar a cada uno según sus necesidades, los productos y servicios creados según la capacidad de trabajo de cada quién.

La defensa de estas ideas ha llevado aun grupo de camaradas en el Estado Mérida a fundar una célula de lla CMR . Pueden encontrarnos los sábados a partir de las 5 de la tarde en el Centro Cultural "Tulio Febres Cordero" y en la dirección de correo electrónico y celular con el que cerramos este artícul. Tambièn pueden conseguir algunos de los libros marxistas que distribuímos así como materailes que ha editado la CMR en la Librería Revolucionaria d eeste mismo Centro cultural.

AUTOR: CMR, MÉRIDA
FECHA: 16 DE NOVIEMBRE
TLF DE CONTACTO: 0414-7489450
EMAIL: edurojo7@hotmail.com