Del 30 de noviembre al 3 de diciembre de 2023 nos reunimos, en la Ciudad de México, 110 camaradas de la Corriente Marxista Internacional. Los países representados fueron Brasil, Perú, Venezuela, Colombia, El Salvador, Bolivia, Argentina, Chile, Cuba, EEUU, Canadá y México (con camaradas de Monterrey, Sonora, San Luis Potosí, Oaxaca, Querétaro, Yucatán, Veracruz, Puebla, Estado de México y Ciudad de México), además de tener representantes de la dirección internacional e invitados de Suiza, Suecia, Italia.
En un ambiente de camaradería se discutieron temas muy importantes para la formación teórica y seguir avanzando en la organización política de nuestra Internacional.
Lenin en la Casa Museo León Trotsky
El jueves por la tarde comenzó nuestro evento con una charla pública en la Casa Museo León Trotsky, lugar donde vivió los últimos años de su vida el revolucionario ruso que fundó al ejército rojo. El tema de la discusión fue la vida y las ideas de Lenin, dirigente del partido bolchevique y de la revolución rusa de 1917. Los compañeros iban llegando desde temprano al museo, algunos lo hicieron incluso iniciada la charla pues muchos venían llegando de sus Estados o países de origen.
Toda nuestra organización a nivel internacional está preparando una campaña para conmemorar los 100 años de la muerte de Lenin y la mejor forma de recordarlo es retomando sus ideas y resaltando los aspectos de su carácter que jugaron un papel especial para llevar adelante sus cometidos. El camarada Jorge Martin, dirigente de la Corriente Marxista Internacional, introdujo la charla haciendo un repaso de su de su participación política desde la formación de los pequeños círculos del Partido Socialdemócrata Ruso hasta la toma del poder y la defensa de la revolución frente al proceso de degeneración que se vivió a los últimos años de su vida.
También nos explicó el contexto en que fueron escritos los libros más representativos de la obra de Lenin y el impacto que estos tenían en los diferentes sectores del partido. Resaltó libros orientados a la organización del partido, por ejemplo, el ¿Qué hacer?, ¿Por dónde empezar?, Un paso adelante dos pasos atrás, etc. También habló de libros emblemáticos del marxismo revolucionario como El Estado y la revolución, La enfermedad infantil del izquierdismo y El Imperialismo, fase superior del capitalismo, entre otros.
En todos los casos el compañero Jorge invitó a leer la obra de Lenin, la cual está llena de experiencias organizativas y políticas, animando a los compañeros más jóvenes a hacerlo y organizarse en torno a sus ideas para construir una alternativa revolucionaria.
Hubo un saludo de los compañeros del Frente de Escuelas Democráticas Febrero 25 (FEDEF 25), ahí presentes, quienes nos ayudaron con algunos aspectos de la organización de la escuela y enviaron a un joven delegado a participar. La directora del museo León Trotsky también tomó la palabra saludando la Escuela Panamericana de la Corriente Marxista Internacional, señalando que así como debemos rescatar el legado de Trotsky, debemos rescatar el papel de su nieto don Esteban Volkov. Explicó que hay un proyecto de hacer algunos documentales sobre la vida de Esteban, quien falleció el pasado mes de junio a sus 97 años de edad. También dijo que le daba mucho gusto encontrar a tantos jóvenes en la audiencia. La Escuela recibió también un saludo fraterno del Partido Comunista de México.
Palestina, imperialismo y construcción del partido
La escuela prosiguió en el Estado de México, con la vista imponente del volcán Iztaccihuatl (La mujer dormida), que cuando no estaba cubierto por nubes frías mostraba su hermosa silueta cubierta de blanca nieve.
Le correspondió nuevamente a Jorge Martín dar la exposición de la siguiente charla, que fue sobre el actual conflicto Israel Palestina, que dijo no se podía realmente caracterizar como una guerra pues es una masacre unilateral del Estado israelí contra el pueblo de palestino. Este conflicto, dijo, ha tenido el efecto de radicalizar a un sector de la juventud que, por un lado, muestra diariamente la masacre, los heridos, la barbarie contra el pueblo palestino; por otro, se muestra la hipocresía de los imperialistas. Dio un análisis conciso, con elementos históricos y explicando el actual conflicto, pero que permitía a los compañeros tener una visión global. Terminó diciendo que no podíamos simplemente hablar del cese al fuego, pues sólo regresaría al punto anterior que no era nada bueno para los palestinos. Lo que debíamos exigir en el fin del capitalismo y el imperialismo. De lo que se trata es de derrocar los regímenes de EEUU, gran Bretaña, los que apoyan al estado sionista isarelí. Nuestra posición se resume en las consignas: ¡Intifada hasta la victoria!, ¡Una sola solución: la revolución! y la lucha por una federación socialista de oriente medio.
La segunda sesión del viernes 1 de diciembre fue introducida por John Peterson, dirigente de Socialist Revolution, la sección estadounidense de la CMI. Habló sobre Lenin y la teoría del imperialismo en América, a 200 años de la Doctrina Monroe. Preguntó ¿Quién no había leído El Imperialismo, fase superior del capitalismo de Lenin? La mayoría de los compañeros habían leído este texto pero dijo que quien no lo había hecho tenía un texto muy bueno por descubrir. Comenzó explicando las características que Lenin da para definir al imperialismo. Dijo que hay en EEUU una enorme cantidad de empresas pero solo quinientas de ellas son las verdaderamente grandes y representan el 66% del PIB. Se trata de una concentración increíble de capital.
El 2 de diciembre de 1823, el gobierno estadounidense articuló la llamada doctrina Monroe que señalaba que los americanos rechazaba cualquier intento de colonización de las potencias europeas. Para los americanos del norte, los únicos americanos eran ellos mismos. EEUU no tenía en ese momento una fuerza militar seria, pero todo cambia y éste país se volvió en la mayor potencia imperialista de todo el mundo. Primero promovió la independencia de Texas y después realizó una guerra contra México en 1846-48, en que se perdió más de la mitad del territorio nacional. El imperialismo estadounidense inauguró con ello una historia de crímenes en América Latina y el mundo en base a la cual se construyó. Pero al final de su charla también señaló John Peterson que nada existe para siempre ni tampoco el imperialismo estadounidense y si hacemos las cosas bien veremos en nuestras vidas la destrucción del imperialismo y la construcción de una federación socialista de nuestra américa. Podremos construir un mundo sin imperialismo, sin clases, sin dinero, sin Estado. Finalizó diciendo. “¡Viva la CMI y viva la revolución socialista y comunista!”
La última sesión de éste día estuvo a cargo de Alessandro Giardiello, dirigente de Sinistra, Classe Rivoluzione, la sección italiana de la CMI. El tema era Lenin y la construcción del partido. El marxista italiano comenzó criticando esa visión idílica de Lenin. Por ejemplo, cuando muere su hermano Alexander ahorcado por intentar asesinar al zar, los estalinistas dicen que Lenin dijo “nosotros no seguiremos por ese camino”. Muestran a un Lenin que de antemano ya tiene una perspectiva hecha y clara, pero la realidad es diferente.
Alessandro dio una visión de Lenin iniciando por los pequeños círculos, las polémicas de 1903, la revolución de 1905. Lenin fue capaz de construir fuertes aparatos pero cuando era necesario los destruía y construía algo nuevo. Lenin era hábil en la discusión con los obreros. A veces le bastaba una frase para comprender una posición política. Debemos aprender del método y la lucha contra cualquier tipo de individualismo. Lenin nunca se preguntaba cómo se le recordaría en el futuro. Con una voz firme Alessandro enfatizó diciendo que Lenin simplemente “¡Hacía lo que debía hacer!” Debemos contribuir colectivamente en la organización del partido.
La construcción de la internacional, la conquista de América y la consigna de la asamblea constituyente
La segunda jornada de discusión en el Estado de México comenzó con el tema “Lenin y la construcción de la internacional en América”. Fue introducida por el camarada Carlos Márquez, dirigente de la Izquierda Socialista en México. Dio un balance histórico, que pasó por la guerra mundial y la revolución rusa de 1917. La idea de una nueva internacional, tras el colapso de la segunda internacional, nació en la cabeza de Lenin y luego se convirtió en una realidad palpable.
En América también se dio una ruptura en el movimiento obrero, que era de inspiración socialista y anarquista. Eso daría paso a la creación de los primeros partidos comunistas como el de Argentina, México, EEUU y Chile. No había en un inicio los cuadros ni la formación política necesaria, el comunismo en América comenzaba a madurar cuando la internacional se burocratizó con el estalinismo. Vimos, pese a ello, el nacimiento de cuadros americanos nacidos de la Internacional Comunista leninista como Julio Antonio Mella y José Carlos Mariátegui, que chocaron con los estalinistas de la Comintern. Es necesario recuperar la experiencia de la internacional y de sus cuatro primeros congresos que son lecciones concentradas del movimiento obrero para la construcción de las fuerzas del marxismo hoy en las Américas.
Jorge Martín introdujo el tema de la conquista de América explicando el desarrollo económico previo a la llegada de los españoles tanto en el imperio ínca como mexica, así como en el caso de la naciente España, que si bien mantenía una economía fundamentalmente feudal, tras de ella empujaba el naciente capitalismo mercantil. Explicó el caso de la conquista de Tenochtitlán que fue multifactorial donde se combinó la manipulación de los conquistadores de las divisiones de los pueblos indígenas, el armamento español, las enfermedades que vinieron de fuera y azotaron a los pueblos indígenas, etc.
Lautaro García, camarada de la Corriente Socialista el Militante de Argentina, fue el encargado de introducir el tema de la consigna de la Asamblea Constituyente. Dio un panorama histórico, explicando que la asamblea constituyente es una consigna democrático burguesa, que puede usarse en condiciones específicas, como las que existían en la rusia zarista ante del gobierno de los soviets, pero ya instaurado éste, aplicarla era un retroceso pues se había establecido un régimen de democracia superior, de democracia proletaria. Dio un panorama de cómo los distintos grupos sectarios en Argentina usan esta consigna, explicando que, si se tiene la fuerza para llevar adelante el programa de los trabajadores, la asamblea constituyente no es necesaria, pues es mejor tomar el poder en tus manos.
Decolonialidad y la experiencia de los gobiernos reformistas en América Latina
En la discusión sobre marxismo y decolonialidad, realizada el domingo 3 de diciembre a cargo del camarada Ubaldo Oropeza, dirigente de la sección mexicana, se pudo escuchar todos los prejuicios que pululan en la academia, no sólo sobre el marxismo, sino sobre la llamada modernidad. Se explicó que, a pesar de pretender defender un pensamiento “autóctono” e “innovador”, sus ideas son un refrito de filosofías idealistas subjetivas, que terminan siendo reaccionarias en su aplicación en la lucha política como lo es el estructuralismo francés, el poscolonialismo y la filosofía de la liberación. Toda esta carga idealista termina siendo un, nada original, posmodernismo latinoamericano. También se demostró cómo es que, por más discurso radical que declaren, sus alternativas políticas no van más allá que el de un capitalismo autóctono reformista. Su llamado a apoyar a gobiernos reformistas, organizar pequeños núcleos de resistencia sin transformar su realidad, apelar a una “economía no capitalista basada en los postulados del Foro de Sao Paulo”, etc. Todo esto en los límites de la economía de mercado. Se explicó también los diferentes prejuicios que tienen sobre el marxismo y se expuso cómo es que desde el marxismo se puede hacer un análisis científico de la realidad latinoamericana y ofrecer una verdadera salida revolucionaria a los problemas que tienen la gran mayoría de la población. Sólo la lucha por el socialismo puede lograr esto.
Evandro Colzani de la dirección de nuestra sección brasileña, Organização Comunista Internacionalista expuso el tema “Balance de los gobiernos reformistas de América Latina”. En los años 80 y 90 se dio una fuerte ofensiva contra la clase obrera en todos los países, con privatizaciones de las empresas públicas. Eso generó una reacción posterior expresada en la lucha de clases como el argentinazo de 2001, la comuna de Oaxaca de 2006 y muchos otros más. Estas explosiones, al no conseguir la toma del poder de los trabajadores se manifestó, en la entrada de distintos gobiernos reformistas. Éstos se vieron favorecidos con un boom de las materias primas. Se expresan tendencias reformistas que tratan de dar contenido teórico como el socialismo del siglo XXI que se contraponen a las teorías revolucionarias del marxismo.
Evandro dio un panorama general del proceso donde las reformas limitadas en un periodo de boom se convirtieron en contrarreformas. Los gobiernos supuestamente progresistas pueden terminar atacando a la clase trabajadora. Comentó la llamada segunda ola progresista y sus límites al no romper con el sistema. Concluyó diciendo que confiamos en la clase trabajadora y su capacidad de tomar el poder en sus manos, pero para ello necesitamos construir una dirección revolucionaria.
La revolución cubana
Se tuvo también un panel, con la participación de compañeros cubanos, para discutir la revolución cubana. En este se analizaron los distintos periodos que ha vivido con sus primeros años marcados con una búsqueda de extender la revolución (aunque con métodos guerrilleros) y una enorme participación de los trabajadores en la construcción de la nueva sociedad. Se explicó el quinquenio gris (adaptación a la URSS con una posición acrítica), el periodo especial y la situación actual de Cuba con sus reformas de libre mercado y el peligro de restauración capitalista. También se explicó el papel de la juventud actual, de movimientos que emergen (incluso fuera de las estructuras oficiales) en el debate de la revolución y su defensa. En dicho panel, Jorge Martín explicó la posición de la CMI ante la revolución cubana diciendo con claridad: “Nuestra posición es la defensa incondicional de la revolución cubana” lo cual fue recibido por los asistentes con entusiastas aplausos. Se explicó la amenaza constante del bloqueo imperialista, los peligros de las reformas y la necesidad de la defensa de la economía planificada, el establecimiento de una verdadera democracia obrera y la necesidad de romper el aislamiento extendiendo la revolución a nivel internacional.
Ambiente camaraderil
No fue fácil organizar esta escuela pero fue posible por el nivel de experiencia y desarrollo de la sección mexicana, así como la confianza en las ideas y la internacional. No se recibieron subsidios de ningún tipo, la escuela fue financiada por las aportaciones de los militantes mexicanos como de las Américas. Tuvimos dificultades de todo tipo, incluyendo la deportación arbitraria de un compañero colombiano que fue retenido de manera arbitraria por más de 12 horas e incomunicado. Esa es la realidad que viven diariamente los migrantes, a quienes se les trata de forma humillante por un gobierno que declara en sus discursos ser su aliado.
Vimos muchas participaciones en todos los debates, donde en algunos casos no era suficiente el tiempo para abarcar a todos los compañeros que querían participar. Todas las introducciones fueron excelentes, y fueron complementadas con muchas participaciones también de alto nivel político que te dejaban con un alto panorama del tema tratado. Los compañeros que no tienen al español como su lengua materna se esforzaban por intervenir en ese idioma.
Se notaba que muchos compañeros habían leído previamente los textos para los debates y no llegaban a improvisar sino que se habían preparado para tener una escuela con alto nivel.
El ambiente vivido fue muy camaraderil. Una noche hicimos una fogata y los compañeros bailaban en el pasto pero después comenzaron a cantar a Silvio Rodríguez, cantos de la guerra civil española y cantos revolucionarios latinoamericanos. El ambiente era de camaradería, entusiasmo y alta moral. Pudimos comer distintas comidas mexicanas como pozole, enchiladas, chilaquiles, pambazos y demás. Se hizo una caminata muy de mañana donde se escaló un pequeño volcán y los compañeros que subieron pudieron apreciar una hermosa vista de los volcanes Popocatepetl e Iztaccihuatl.
En la última fiesta se bailó con un poco de tequila, cerveza y la bebida mexicana llamada pulque traído de un Tinacal cercano a nosotros, que levantó opiniones contradictorias sobre el gusto de esta bebida prehispánica entre los camaradas. Se cantaron cantos revolucionarios de los distintos países, quizás no todos somos muy buenos cantantes pero se sentía la energía revolucionaria que se mostró, por ejemplo, cuando se cantó al unísono el canto chileno: “Venceremos”; pero se demostró aún más claramente en la colecta internacional, donde juntamos alrededor de 161 mil pesos mexicanos (9,300 dólares).
Construyendo la CMI
El último punto fue un informe del trabajo de la CMI mostrando el crecimiento significativo de la Internacional en países como Gran Bretaña, Italia, el Norte de América y el desarrollo en América Latina. Siguieron una serie de participaciones, el compañero Benoit de Canadá dio un informe inspirador, aunque el tiempo era insuficiente de mostrar el trabajo de los marxistas en este país. Pero podríamos resumir en una frase “Hoy mismo somos el partido trotskista más grande que jamás haya existido en la historia de Canadá”. La compañera Laura Brown, explicó también el enorme desarrollo en EEUU donde hemos superado la cifra de los 600 compañeros. Dijo: hay millones de comunistas sin partido, cuando entramos en contacto con ellos les decimos que debemos organizar a esos comunistas, que somos una gran fuerza pero dispersa y que necesitamos que los compañeros se integren en la organización para buscar a los comunistas dispersos y organizarnos todos como el partido comunista que necesitamos. Se explicaron los avances en países como Colombia o Perú. También hubo intervenciones de compañeros jóvenes como la camarada Victoria de Yucatán, el compañero Rafael de Bolivia o el compañero Darío de Suiza, quienes mostraban los avances de sus regiones y países. También hubo ejemplos muy ilustrativos de la construcción en algunas ciudades norteamericanas.
Jorge Martin, dirigente de la Corriente Marxista Internacional, clausuró el evento. Recordó como en el pasado los trotskistas, que se llamaban los bolcheviques leninistas, tenían el camino bloqueado a las bases de los partidos comunistas. Hoy la Corriente Marxista Internacional está ganando a cientos de comunistas en el mundo y eso refleja una cosa: estamos reclamando nuestra verdadera herencia comunista. Terminó leyendo una extensa frase de Trotsky que culmina diciendo: “nunca olvidaremos que nuestro partido es ahora la mayor palanca de la historia. Alejados de esta palanca, cada uno de nosotros no es nada. Con esta palanca en las manos, somos todo”.
En medio de aplausos entonamos en español, inglés, francés, portugués y otras lenguas, La Internacional y después Bandiera Rossa.