Debemos demandar la realización de una jornada de lucha para el 1 de septiembre, día del sexto informe de gobierno de Fox, que tenga como principal objetivo la realización ese mismo día de movilizaciones y de una huelga general de 24 horas. Para esa En una fugaz sesión de apenas 118 minutos desarrollada el sábado 5 de agosto, el Tribunal Electoral decidió abrir solamente 11 mil 839 casillas para hacer un recuento parcial que únicamente abarca el 9.07% del total de los votos de la pasada elección presidencial. Con esta medida los magistrados electorales desatendieron la demanda del PRD y Andrés Manuel López Obrador (AMLO) para que se hiciera el recuento de la totalidad de las boletas electorales.
Dicha determinación ratifica la insistencia de Militante en el sentido de que no se puede tener ni un gramo de confianza en el tribunal electoral. Los magistrados no son otra cosa más que agentes al servicio de los banqueros, los industriales y Fox, por tanto un engranaje más al servicio del fraude electoral.
Ante este resultado, en la asamblea del sábado por la noche en el campamento del Zócalo capitalino, AMLO cuestionó severamente el dictamen de los magistrados y señaló que el movimiento de lucha contra el fraude electoral pasaría a acciones más severas para presionar al tribunal electoral. Y que dichas acciones serían anunciadas durante la asamblea informativa convocada para el día domingo.
Por su parte, ese mismo sábado, las masas pasaron de la frustración a la rabia, para después movilizarse el domingo a la asamblea con AMLO. En dicha concentración, las propuestas de AMLO para continuar la lucha se centraron en mantener el plantón del Zócalo y otras calles y trasladar a la sede el tribunal electoral la asamblea de los lunes de las 7 pm.
Desde nuestro punto de vista, el dictamen del tribunal reitera el hecho de que Fox y los empresarios no están dispuestos a dar un sólo paso atrás en su decisión de imponer a Felipe Calderón (Fecal) en la presidencia por medio del fraude. Para estos señores el asunto del Estado es una cuestión muy sería pues es su principal herramienta de dominación y, por tanto, no están dispuestos a retroceder si no son obligados.
Pero para los trabajadores, la cuestión de quién gobierna para nada es un aspecto secundario. La continuidad del PAN en el poder significa la plena garantía de que no sólo se mantendrá la misma política heredada del PRI y que ha conducido a la miseria a millones de mexicanos; esa misma política que ha hecho del desempleo, de los salarios de hambre, de las privatizaciones, del recorte al gasto social, etcétera, una fuente de acumulación de multimillonarias fortunas para un puñado de empresarios.
Con la enérgica lucha contra el fraude, millones de trabajadores de la ciudad y el campo estamos demostrando nuestra disposición a transformar nuestra realidad de forma radical para dejar en el pasado esa funesta historia de ataques y recortes a nuestros niveles de vida.
Por consecuencia, en este momento los trabajadores de todo el país enfrentamos un doble reto: por un lado, derrotar al fraude electoral y, por otro, eliminar desde la raíz todo aquello que nos empuja día a día a la miseria. Pero estas luchas no pueden ser cuestiones separadas, al mismo tiempo que luchamos contra el fraude debemos luchar por eliminar aquello de donde emana la fuente de poder de la burguesía: la propiedad privada sobre la industria, los bancos, los medios masivos de información, los monopolios comerciales y del transporte, etcétera.
En su discurso de la primera asamblea del lunes 7, desarrollada en la sede del tribunal electoral, AMLO destacó que «vamos a la transformación de nuestro país, y eso se va a dar de una manera o de otra». Esta es una idea correcta con la cual estamos de acuerdo y por ello aseguramos que para cumplir con ese objetivo es necesario elevar el nivel de presión sobre la burguesía y Fox, para arrodillarlos y obligarlos a reconocer el triunfo electoral de AMLO. Pero también es necesario que a la par, AMLO plantee un programa de lucha que llame a los trabajadores a expropiar a la burguesía.
Por ello el plan de acción para derrotar al fraude debe estar dotado de medidas contundentes que demuestren que el verdadero poder esta en manos de nosotros los trabajadores; que sin nosotros no se produce un sólo tornillo en este país y que, por tanto, si queremos erradicar la miseria, la principales palancas de la economía deben estar bajo nuestro control democrático, pues esta es la única garantía de que la riqueza que se produce se distribuya entre toda la clase trabajadora y no termine en manos de un puñado de burgueses.
En esa medida, el plan de acción para derrotar a la burguesía y al fraude debe tener como principal eje el desarrollar una huelga general de 24 horas que paralice la producción y a la propia burguesía y a su gobierno lacayo. Y si después de esa medida Fox no cede, se debe convocar a una huelga indefinida. También, para fortalecer la lucha, ese plan debe contener un llamado a los sindicatos y agrupaciones campesinas a luchar de forma unificada contra el fraude, pero también por mas empleo, mejores salarios, en defensa de la educación pública y el sistema de salud, etcétera, así como por mejores condiciones de vida y trabajo en el campo. Todo ello, insistiendo en que para impedir que nos roben lo poco que nos queda es necesario eliminar la propiedad privada sobre los medios de vida. Es decir, debemos unir la lucha contra el fraude y la defensa de nuestros intereses, con la lucha por el socialismo.
Ese mismo lunes AMLO destacó que su lucha es por cambiar la «realidad de injusticia y de opresión» que se vive en México, en ese sentido debemos demandar la realización de una jornada de lucha para el 1 de septiembre, día del sexto informe de gobierno de Fox, que tenga como principal objetivo la realización ese mismo día de movilizaciones y de una huelga general de 24 horas. E insistimos, sí Fox no retrocede, pasar a la huelga indefinida.
Por ello, para esa jornada de lucha se tienen que organizar asambleas en los sindicatos, en los campamentos del plantón, en las colonias, en los ejidos y comunidades, para organizar la huelga lanzando una intensa campaña de agitación y organización. También los comités de información y contra el fraude electoral se tienen que abocar a la tarea de impulsar la huelga general.
Hasta el momento ya hemos realizados las movilizaciones mas grandes de la historia de México. El paso siguiente es el de la huelga general. No tenemos otro camino: son ellos o nosotros; es el fraude o el reconocimiento del triunfo de AMLO; es seguir bajo la miseria a la que nos somete el capitalismo o superar la barbarie capitalista luchando por el socialismo.