Una representación del sindicato que agrupa a los trabajadores del comedor de Edelca en el proyecto Macagua, aseguró que la empresa para la que laboran les adeuda más de 300 millones de bolívares y además se está dedicando a retrasar la discusión del Una representación del sindicato que agrupa a los trabajadores del comedor de Edelca en el proyecto Macagua, aseguró que la empresa para la que laboran les adeuda más de 300 millones de bolívares y además se está dedicando a retrasar la discusión del nuevo contrato colectivo.

Alirio Hernández, secretario de organización del Sindicato Único de Trabajadores de Empresas de Restaurantes de Comida Rápida, Hoteles, Bares, Clubes, Casinos, Entretenimientos, Mantenimientos, Sus Similares y Conexos de la República Bolivariana de Venezuela, Sintrarescom, indicó que la empresa que presta servicios a Edelca, se ha retirado de la discusión del proyecto de convención colectiva, que beneficiaría al menos a 300 trabajadores.

"Aunque la mayoría de las cláusulas están aprobadas, se han enfrascado en el reconocimiento de deudas contractuales y en la negociación de las cláusulas referidas a los beneficios socioeconómicos".

Aseguran que desde que comenzaron a trabajar en el proyecto Macagua durante el año 2003, la empresa ha excedido la jornada semanal de trabajo en 4 horas, por lo que exigen la cancelación del total de horas acumuladas con los intereses que han devengado desde que se generó la deuda.

"Por otra parte, han dejado de pagar las guarderías infantiles, que según lo estipula la Ley debería cancelarse en empresas con más de 20 trabajadores por un monto de hasta el 38% del salario, sin embargo, han hecho caso omiso a esto".

Aseguró Hernández que últimamente la empresa decidió de manera tajante jugar con el sindicato, poniendo piedras de tranca y respondiendo con mentiras. Aunque la representante legal asistió a la primera reunión, luego se retiró sin dar mayores excusas.

"Estamos en completa disposición de llegar a un acuerdo para que estos problemas se solucionen de una forma pacífica, pero si no atienden nuestro llamado, tendremos que tomar otras acciones, como una posible huelga. Esperamos que la Inspectoría del Trabajo entienda la importancia del caso y le imprima celeridad", concluyó.