La lucha contra las desviaciones del Proyecto Bolivariano originario y el burocratismo, no debemos darla solamente en el ámbito de los derechos políticos sino también en el campo de los derechos sociales y económicos. En el caso de las Misiones, el p La lucha contra las desviaciones del Proyecto Bolivariano originario y el burocratismo, no debemos darla solamente en el ámbito de los derechos políticos sino también en el campo de los derechos sociales y económicos. En el caso de las Misiones, el pueblo organizado debe mantenerse muy activo y vigilante ante las múltiples perversiones que están ocurriendo debido a las acciones inescrupulosas por parte de funcionarios burócratas y corruptos.
Vamos a hacer referencia a algunos hechos que están ocurriendo actualmente en la Misión Mercal, en el Estado Vargas, basado en el testimonio de trabajadores en instalaciones MERCAL y del Puerto de La Guaira. El primer caso, está referido al Mercal ubicado en La Guaira colonial, a escasos metros de la sede de la Gobernación y en el cual se están sucediendo verdaderos desastres con la participación cómplice de la "gerente" del establecimiento: Robo masivo de mercancía, despelote total en el control de inventarios y de la contabilidad diaria, víveres que se descomponen, mercancía que es enviada en cantidades injustificadas y rubros no demandados pero que tal vez generan ganancias para los encargados de las compras en la sede principal. Informes van e informes vienen sin que nada pase.
El segundo caso, es referido al manejo que hacen mafias organizadas con alimentos importados para la Misión Mercal, gandolas enteras son desviadas y comercializadas por aduaneros en complicidad con autoridades portuarias quienes las distribuyen en el mercado negro.
Si el Gobierno Revolucionario no se decide a transferir mayor poder al pueblo organizado a través del control social ejercido por organizaciones de poder popular en los barrios y comunidades, no cabe duda que en el mediano plazo el sistema Mercal entrará en una grave crisis financiera que pudiera llevar a su lamentable colapso.
Sólo el pueblo vigilante y organizado como lo estipula el artículo 62 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela sería capaz de frenar este inmenso descontrol que pudiera estar ocurriendo en todo el país. Hay que constituir comités de vigilancia parroquial y de los trabajadores. Las organizaciones populares y revolucionarias debemos presionar, con igual fuerza, a como lo hemos venido haciendo en contra de las imposiciones burocráticas en el proceso de selección de candidaturas, para profundizar la Revolución. Deberán surgir nuevas formas de organización, bajo el impulso del poder nacional, que garanticen una eficiente contraloría social para quitarle poder a los funcionarios y transferirlo al pueblo.
El camarada Francisco Rivero es parte del Colectivo Vargas Revolución, movimiento político que está presentando una serie de candidatos comprometidos con el proceso revolucionario (ver LAS BASES REVOLUCIONARIAS ELIGEN: GLADYS REQUENA CANDIDATA A GOBERNADORA). Adicionalmente, el camarada es parte de la célula de la CMR del Estado Vargas.