A un año de la gloriosa insurrección indígena, obrera y popular que comenzó con la defensa del gas y que termino con la fuga de Gonzalo Sánchez de Lozada, la insatisfacción de la clase trabajadora boliviana por la irresolución de las demandas del Oct "..mi papá ha sido un héroe, ha dado la vida por el país, aunque yo veo que la situación no ha cambiado mucho en el país desde Octubre del año pasado.." son las declaraciones de Rocío Atahuichi, hija de 16 años de Luis Atahuichi, minero que murió combatiendo en El Alto-Bolivia.
A un año de la gloriosa insurrección indígena, obrera y popular que comenzó con la defensa del gas y que termino con la fuga de Gonzalo Sánchez de Lozada, la insatisfacción de la clase trabajadora boliviana por la irresolución de las demandas del Octubre Rojo – no a la exportación irracional y por la nacionalización de los hidrocarburos- siguen patentes, rompiendo la tregua con Mesa, reflejando un nuevo ascenso de la lucha de clases, que recomenzó con las jornadas del movimiento estudiantil y del magisterio en Abril- Mayo de este año y que ahora, ha sumado su primer muerto en la lucha de los campesinos cocaleros del Chapare.
Mesa en la ONU y la crisis de los partidos burgueses.
Después de la ruptura de la tregua con Palacio Quemado, el oxigeno que le brindaran el globo del tranparendum y Evo Morales a Mesa, comienza a desinflarse hasta marcar menos del 60% de apoyo popular, en las encuestas. Ésto debido en parte a la aplicación de medidas como el Plan Nacional de Empleo y Emergencia-PLANE- que no ha podido cumplir la promesa dar trabajo a los 360 mil jóvenes desempleados, y por otro, por la continuación de la política de erradicación forzosa de la coca. Es con este menguado respaldo que la Administración Mesa, viaja a Washington para hacer buena letra y rendir cuentas sobre el proceso revolucionario que se ha aperturado en tierra Colla.
“ La presión social que tuvo Bolivia y la crisis de Octubre, vinculada a la cuestión del gas, era mucho mas grave para la seguridad jurídica que la propia legislación como tal” manifiesta el mandatario, expresando la amenaza al poder político burgués. Luego continua “la Ley de Hidrocarburos no será una imposición del Estado boliviano, sino fruto de una negociación con las empresas petroleras y todos los sectores sociales” respondiendo a la táctica política capitalista del Dialogo Nacional-Bolivia Productiva 2004 que tiene como objetivo, aplicar la “paz social” y las reformas imperialistas, incorporación plena de Bolivia a las negociaciones sobre el Tratado de Libre de Comercio (TLC) una vez el Congreso promulgue la ley petrolera. Es por esta ultima razón, que Mesa fijó el eje de su discurso en la cuestión de la mediterraneidad boliviana emplazando a Chile a analizar el tema y prometió que Bolivia seguirá utilizando los escenarios multilaterales para denunciar la negación chilena a la búsqueda de una salida negociada al enclaustramiento boliviano, tratando así de disipar la lucha revolucionaria de las masas andinas. Sin embargo, los trabajadores bolivianos, saben que la lucha contra Goñi es parte de la lucha contra el sistema del libre mercado que involucra al gobierno y a los partidos políticos sistémicos.
Es esta razón, la que los ha llevado a una crisis que incendia en llamas a los partidos empresariales. La fracción gonista del MNR eligió a Mirtha Quevedo como nueva ejecutiva, generando un entrampamiento en el aparato partidario. Luego, varios dirigentes del Movimiento de Izquierda Revolucionario –MIR- renuncian al partido para participar en las “nuevas agrupaciones ciudadanas” . Finalmente, el ex presidente y naipe del imperialismo yankee, Tuto Quiroga, renuncio al partido Acción Democrática Nacionalista –ADN- olfateando la crisis política, para ahora salir a apoyar a los “movimientos ciudadanos”. Todos con miras a ganar las próximas elecciones municipales de diciembre.
El MAS ganara las elecciones municipales como instrumento político de la nación clandestina de trabajadores y en rechazo al modelo neoliberal y el sistema político capitalista
“A estas alturas, nadie debería tener duda sobre un hecho: Octubre, el de hace un año, además de provocar el derrocamiento de un presidente constitucional, se llevo entre las patas al conjunto del sistema político basado en los partidos políticos….y la prueba más evidente es que el actual presidente no tiene partido, no necesita acudir a ninguna militancia, y las próximas elecciones prometen ser la encarnación del rechazo a los partidos”, “el afortunado invento de las agrupaciones ciudadanas es la consagración del acta de defunción de los partidos con su organización, su historia, su ideología, sus principios y proyecto” afirma Cayetano Llobet, ex militante del partido socialista y ahora rabioso emenerrista (La Prensa, 03-10). Y en parte es cierto, ahora todos los “lideres políticos” capitalistas como Paz Zamora empiezan a apoyar a las nuevas agrupaciones ciudadanas como la Unión Social de Trabajadores de Bolivia –USTB-donde Mateo Laura, militante mirista, postula a la Alcaldía de La Paz.
De igual manera, el expresidente Tuto Quiroga, viene respaldando a candidatos que han renunciado a sus viejos aparatos partidarios como el Alcalde de El Alto, José Luis Paredes, quien fue electo por el MIR y ahora se presentará con una “agrupación ciudadana”para postular a la misma Alcaldía. El Tutismo, que se lo ve como el contrincante político del MAS- trata así de implementar un nuevo estilo de hacer política. “Debemos refundar la política sin refundir la economía” declaro alguna vez el niño mimado de Harvard (el juguete rabioso, 19-09). Y ese es su proyecto político, continuar con la aplicación del capitalismo en la tierra aymara. El barco se hunde y los agentes políticos del imperialismo yankee tratan de agarrar un salvavidas, pero ya es demasiado tarde. El pueblo trabajador boliviano es sabio y entiende que Tuto y los demás son parte del sistema que los ha llevado a la miseria y la incertidumbre. Por esta razón, el pueblo aymara y trabajador boliviano, al igual que el brasileño con el PT, acudirá a las urnas el 5 de diciembre para votar por el MAS.
Esto último no quiere decir que el Movimiento Indígena Pachacuti, que postula a la compañera ex barrendera y gremialista Filomena Carrasco a la Alcaldía de La Paz, la Central Indígena de los Pueblos Originarios del Oriente, el Movimiento 17 de Octubre-M17- de Roberto de la Cruz, las “agrupaciones ciudadanas” o los dirigentes gremiales como Raúl Ríos que después de realizar una movilización de miles por la ciudad de Chuquiago Marka, lanzara su candidatura, consigan una votación significativa, incluso ganaran algunas alcaldías en los pueblos del Oriente. No obstante, el MAS obtendrá la victoria, no por Evo Morales o sus dirigentes burócratas y reformistas, sino por ser el instrumento político de los trabajadores del campo y la ciudad. Los cocaleros, campesinos, indígenas y obreros votaran por el MAS apropiándose de los rasgos indígenas de Evo, porque ven en el movimiento su instrumento político natural que les ha costado mucho sacrificio militante y además, porque expresaran su rechazo al sistema político empresarial y proimperialista.
Sin embargo, esta victoria será el comienzo de la derrota de la política de la dirección del MAS como alternativa de cambio social. Su estrategia política parlamentarista de presionar al gobierno lacayo de Mesa para resolver la crisis económica, su participación en las mesas del Dialogo Nacional y la Asamblea Constituyente, sin trastocar estructuralmente la transformación del Estado, lo conducirá sin reparos a la conciliación constitucional, que ya en Octubre Rojo alejo la salida revolucionaria, al continuismo del despeñadero, en el que hoy se debaten tanto la oligarquía política, como el reformismo progresista. La dirección del MAS, muy a pesar suyo, carece de una alternativa revolucionaria al sistema capitalista, carece de aquello de lo que sólo la clase obrera es capaz de crear, una estrategia de poder. (En la entrevista concedida a Tiempos de Opinión de junio pasado, éste le pregunta, Evo, porqué lo apoya a Mesa “…si él se va quién queda, Ormando Vacadiez?, la dictadura? No habría garantía para las municipales…” )
Un nuevo Diálogo Nacional con Asamblea Constituyente-AC- para frenar las luchas
Al igual que en la tierra andina y trabajadora del Perú, donde el servil Toledo impulsa el Acuerdo Nacional, con la participación de la fracción de derechas en la Confederación General de Trabajadores del Perú para mantenerse en el poder, y a favor de la Asamblea Constituyente, aquí el gobierno mesista se da la política de convocar a un “nuevo” dialogo nacional que así como el pacto social del Goni tiene como único objetivo lograr la “paz social”. Ésto aunado a la convocatoria de la Asamblea Constituyente para refundar el Estado de los empresarios y seguir explotando a los trabajadores.
Varias organizaciones populares, entre ellas la dirección del MAS, vienen haciéndose eco de esta consigna burguesa, mostrando así su lógica política liberal con la que se mueve. Lo que habría que decir es que la AC es una consigna democrática capitalista que tiene como fin salvar el orden burgués proimperialista. Por esta razón es que Goni la convoco mientras caía.
La AC en cambio, se deberia plantear en cualquiera de estas dos razones:
1. Cuando salimos de una dictadura y están pendientes algunas tareas democráticas como la libertad de expresión, organización, reforma agraria, etc.
2. Cuando ésta ayuda a movilizar a los sectores mas atrasados por las consignas socialistas.
Octubre con su rojo horizonte refleja la magnitud de la crisis del Estado capitalista por el que trasunta la arquitectura social boliviana. Es un Estado que se cae a trozos. Octubre tuvo que ver con el gas, en tanto y en cuanto, éste sirvió para traslucir centenarias contradicciones y conflictos irresueltos, que aún quedan pendientes. La balcanización del país parece devenirse. Un sector de la burguesía intenta jugar la carta de la autonomía de las regiones para seguir manteniendo su dominación, aún sea sobre sólo una parte del país. Mientras la mayoría de obreros y campesinos, la mayoría indígena no siente ya ningún respeto por las instituciones de este estado, no sólo por motivos de reivindicación cultural, sino también porque han visto en la práctica y de forma descarnada a qué intereses de clase responde.
Sin embargo, el pueblo trabajador boliviano se movilizo en Octubre no por la AC, sino por la defensa del gas. Por lo tanto, la Asamblea Constituyente es un intento de darle un balón de oxígeno a la clase dominante boliviana, refundar su Estado capitalista y darle fuerzas para golpear a nuestra clase trabajadora.
En efecto, lo mas acertado, en términos auténticamente revolucionarios en esta coyuntura, es la consigna de la Asamblea Popular –AP-planteada por la COB, por el compañero Jaime Solares, Roberto de la Cruz y Miguel Zubieta. Esta consigna, que entronca con las tradiciones revolucionarias de 1971, hay que entenderla como la convocatoria de un gran plenario nacional de delegados de cada fábrica, mina, comunidad campesina, barrio, junta vecinal, universidad, etc elegidos y revocables en cualquier momento que se planteen la tarea de tomar las riendas de la sociedad en sus propias manos. Por lo mismo, es necesario pasar de la palabras a los hechos, hacer un nuevo Octubre y organizar la AP con el objetivo de construir un nuevo poder de los trabajadores que destruya el podrido y desacreditado aparato estatal burgués.
Hagamos un nuevo Octubre para tomar el poder
Se acerca el 17 de Octubre, y la lucha de clases tiene un nuevo ascenso por la irresolución de las demandas sociales. La Administración Mesa al querer continuar las recetas de los Halcones de la Casa Blanca, con la cuestión del déficit fiscal, la aprobación de una Ley de Hidrocarburos amañada y la erradicación forzosa de la coca lo que logrará es echarle mas leña al fuego. A la muerte de un compañero cocalero en El Chapare, Mesa tuvo que trucar su agenda de viaje a Washington y arreglar un convenio con Evo y la Federación de Cocaleros por temor a un nuevo levantamiento.
Actualmente, la Ley de Hidrocarburos y el Juicio de Responsabilidades (es decir el juicio a los asesinos de nuestros compañeros cuando el Octubre Rojo) ha generado un impase entre el Ejecutivo y el Parlamento. “El gobierno, Santa Cruz, Tarija y el MIR rechazaron ayer el proyecto de Ley de Hidrocarburos que presento la Comisión Mixta de Desarrollo Económico del Congreso y comenzaron a movilizarse” dice el diario La Razón del 05 de Octubre expresando la polarización que se vive dentro del propio parlamento producto del ascenso de la lucha de clases. Luego, en su edición del 07 de Octubre, La Razón declara ”El poder Ejecutivo ratifico ayer que la cooperación internacional, reunida en la junta anual de gobernadores del FMI y el Banco Mundial, advirtió con suspender su apoyo económico al país si el Congreso llega a aprobar una ley petrolera que afecte las inversiones, ponga en riesgo la seguridad jurídica de las empresas e inviabilice las exportaciones de las reservas de gas del país” manifestando la presión de los vampiros transnacionales para apoderarse de los hidrocarburos bolivianos.
Sobre el juicio de responsabilidades habría que decir que, al igual que en el Perú, Argentina o Brasil, la burguesía y el Imperialismo luchan por la impunidad para sus agentes. En el reciente juicio abreviado a Kukoc, éste simplemente aceptó su culpabilidad y, el juez lo dejo libre después de penarlo con dos años de cárcel y con el derecho al Perdón Judicial. Lo mismo les ocurrió a varios que fueron parte del gobierno genocida de Sánchez de Lozada.
Es por esta razón que los familiares de los muertos y heridos de Octubre han convocado a varias actividades para los próximos días. Los propios cocaleros marcharán desde Caracollo a La Paz este 11 de Octubre. La Coordinadora en Defensa del Gas, los regantes, campesinos y otros sectores de Cochabamba llaman a marchas en defensa de los hidrocarburos para el 11 y 15 hacia la sede del gobierno. La COB ha llamado a una movilización para el 15, y así los gremiales, los comerciantes, los estudiantes, etc. están organizándose para la gran marcha del Octubre Rojo.
Estamos a las puertas de un nuevo auge de la lucha de clases de carácter reivindicativo, pero como bien plantea el compañero De la Cruz y Jaime Solares, tiene que apuntar a la organización de la Asamblea Popular –AP-. Sin embargo, para esta tarea historica es necesario aprender las lecciones de Febrero y del Octubre Rojo y las de la reica experiencia revolucionaria del proletariado boliviano. Hay que construir una dirección auténticamente revolucionaria con un método correcto hacia la vanguardia y el movimiento popular con el fin de unificar en una sola organización a las decenas de miles de activistas del movimiento obrero, campesino y juvenil para que peleen por esta política en cada fabrica, comunidad o centro de estudios hasta la victoria final.
¡Hagamos un nuevo Octubre por la toma del poder!
¡La sangre derramada jamás será olvidada!
¡Por la nacionalización de los Hidrocarburos!
¡Por la derrota del Imperialismo Yanqui!
¡Que viva la revolución boliviana y venezolana!
¡Que viva la unidad andina y trabajadora Bolivia, Venezuela y Perú!
¡Socialismo o Barbarie! ¡Venceremos!
El camarada César Zelada es militante de la organización Fuerza de Izquierda Socialista, Coordinador de la Campaña Internacional Manos Fuera de Venezuela y prisionero político peruano en el penal de San Pedro en La Paz-Bolivia.